El jengibre, Zingiber officinalis, es una de las especias más conocidas en todo el mundo tanto por sus aplicaciones culinarias como en su uso medicinal. Tiene un sabor picante muy aromático.
Gran analgésico y antiinflamatorio, eficaz en dolores artríticos o reumáticos. Suele mejorar la movilidad de la zona tratada y disminución del dolor.
Muy utilizado para prevenir o tratar las enfermedades cardiovasculares ya que reduce los niveles de colesterol y, a la vez, tiene un suave efecto anticoagulante.
Tónico circulatorio, es ideal para mejorar el riego sanguíneo ya que produce un efecto vasodilatador. Las personas con manos y pies fríos notarán siempre una gran mejoría. Es uno de los remedios naturales más eficaces en caso de cefaleas, jaquecas y migrañas.
La medicina popular viene recomendando el jengibre con mucho éxito en las nauseas del embarazo. Hoy en día se está probando también para las nauseas y vómitos de la quimioterapia. Una infusión de jengibre con un poco de miel u otro endulzante suele producir un gran alivio.
Facilita la digestión de los alimentos y es muy útil en caso de gases, hinchazón abdominal, pesadez, espasmos digestivos, etc. Algunos pacientes de colon irritable también comentan observar mejoría de sus síntomas. Eficaz ante cualquier resfriado u otra infección (otitis, cistitis, anginas, bronquitis, etc.) especialmente cuando la persona siente que cogió frió. También alivia la tos y favorece la expectoración.