
• Poseen una potente capacidad de recarga enzimática.• Excelente fuente de antioxidantes, los cuales previenen el envejecimiento y el desgaste prematuro de la piel.• Sus enzimas son remedio natural ideal para desinflamar órganos internos como el hígado, los riñones y el páncreas: es un regenerador pancreático, por lo que ayuda notablemente a erradicar diabetes (en muy poco tiempo), además• Elimina la cirrosis al aumentar el conteo de hepatocitos del hígado y de paso, claro, lo desinflama.• Recarga los riñones de enzimas, ayuda a eliminar exceso de líquidos.• Previene arteriosclerosis.• Ayuda en casos de gota, edemas, gastritis y úlceras de estómago.• Ideal para combatir la hipertensión.• Contiene lipasa, una enzima que ayuda a depurar grasas nocivas en las venas, arterias, o simplemente de los depósitos de grasa, por lo que sirve para como un remedio extraordinario contra la obesidad, celulitis, abdomen abultado, etcétera.• Ayuda a quemar grasas, disminuye colesterol. Muy buen alimento para dietas de control de peso o para bajar colesterol.• Un gran remedio para afecciones de riñones y vejiga (cistisis), ya que mata bacterias en las vías urinarias. Lo puedes tomar así, tal cual, en ensaladas o licuados e incluso sopas o aderezos.
LECHE DE ALPISTE
Pon a remojar cinco cucharadas soperas de alpiste en agua pura desde la noche anterior. En la mañana, elimina el agua en que se remojó, y pon el alpiste remojado en un vaso con dos dedos de agua y procesalo, muelelo, añade 1 l. de agua y cuelalo, puedes agregar leche de soja y fruta al gusto o simplemente licuar y tomar la leche de alpiste endulzada con miel de abeja (no azúcar), la cual es una nutritiva y energética leche para empezar el día (por las mañanas) y para terminarlo (por las noches, tomar caliente). Es muy importante que no endulces esta leche con azúcar blanca, la cual es muy nociva e irritante en tu cuerpo, además de que destruye las enzimas y el efecto de esta leche. Evita el azúcar refinada siempre que puedas, y si tienes niños pequeños no los acostumbres a las leches azucaradas ni a los caramelos.